Son momentos difíciles…momentos en los que observar se ha convertido en lo mas importante y no solo eso sino que estudiar los comportamientos (tanto míos como ajenos) me está ayudando a comprender todo aquello que desconozco, tanto mío propio como aquello que es ajeno a mi.
Como en toda observación que se precie, se obtienen datos empíricos. Esta sin embargo es una observación especial pues no busco el empirismo que me ofrecen los datos observados sino que busco emociones. Si, emociones. Pero no mías (afortunadamente tengo claro lo que siento y lo que no), sino en emociones ajenas.
Emociones ajenas que me ayuden a comprender a aquella chica en la que (como recientemente me ha dicho una gran amiga) he puesto el ojo. Analizar sus gestos, palabras, miradas, sonrisas…mantienen no toda mi atención, pero si una pequeña parte.
Puede que todo esto resulte bastante rallante(puede no, lo es) pero bueno, como bien me dijeron hace ya tiempo…hago montañas de un grano de arena… y puede que este sea el verdadero motivo de mi ¿rayara?...yo preferiría definirlo como el motivo que me ha llevado a escribir esto, pues como saben aquellos que son cercanos a mí, soy bastante reservado y no me gustar ni contar cosas mías ni hablar de mi así que prefiero escribirlo, me siento a gusto conmigo mismo…y todo aquel/la que quiera leerlo es puede hacerlo sea para ayudarme a encontrar soluciones, para sentirse identificado/a con lo escrito o para hacer lo que le de la gana…
Volviendo a lo que iba….
Inexplicablemente, en estos últimos tiempos me he sentido…digamos…atraído…por diversas chicas… ¿nombres?... se dice el pecado no el pecador…que casualidades de la vida…acaban de dejarlo con sus respectivas parejas…llamarme oportunista si queréis, yo también me llegado a definirme así…
Todo para que…para que volvieran con sus parejas al poco tiempo…
Lamentablemente para mis objetivos”amorosos” soy un chico bastante comprensivo en todo, suelo dar buenos consejos a todo el mundo (y que por cierto ninguno me sirve a mi), y mas que llegar a ser una pareja, me convierto en un mas que un amigo en el que se puede confiar y contar absolutamente cualquier cosa, con la certeza de que no voy a soltar prenda…
¿Pero que le voy a hacer si soy así?...a estas alturas ya no se puede hacer nada. He intentado varias veces cambiar el estilo, es decir, en vez de ir a fijarme yo, hacer que se fije en mi….pero con nulo resultado…o no
Esta última reflexión me tiene bastante preocupado, ¿cómo saber si le gustas a una chica cuando ella no lo es lo suficientemente, digamos valiente, para decírtelo a la cara? Lamentablemente, a esta pregunta no tengo respuesta
Por último hare una última reflexión para dictaminar un posible culpable a todo esto
MALDITA PRIMAVERA QUE NOSE PORQUE MIERDA AL CORAZON Y A LA SANGRE ALTERA
